miércoles, 21 de abril de 2010

Recomendaciones de mi librero para el día del libro

En el post anterior mencionaba a mi librero de cabecera: Mitad psicólogo mitad filólogo, se lo lee todo: algunas cosas por placer, otras para poder hacer su trabajo, que no es sólo vender libros, es saber cuál es el libro adecuado para cada persona.

Le he pedido tres recomendaciones de cara al Día del Libro -que, por si no os han bombardeado suficiente todavía, os informo que es el 23 de abril- y esto es lo que me ha dicho:

Junto a los libros que el Boca-Oreja lleva tiempo aupando como "El tiempo entre costuras" o "Los ojos amarillos de los cocodrilos", y las novelas de los superventas españoles como "El asedio" de Pérez-Reverte, "Venganza en Sevilla" de Matilde Asensi o "Dime quién soy" de Julia Navarro; hay toda una producción de libros que merecen una recomendación para este Día del Libro.

"Mi Tío Napoleón" (Iraj Pezeshkzad, Ático de Libros) es, sobre todo, una comedia. No una astracanada, una comedia que -por ratos- puede ser incluso más tierna o más triste que un libro con pretensiones de seriedad. La historia del Irán de los años 40 importa algo menos que la del joven narrador que empieza a conocer el amor al prendarse de su prima y la historia de la chaladura casi quijotesca de ese tío obsesionado con Napoleón y con la maldad de los ingleses que mete baza en cualquier asunto que pueda, especialmente en los relacionados con su hija. Una gran novela a descubrir, de cuando comedia aún significaba algo.

"La Playa de los Ahogados" (Domingo Villar, Siruela) es un libro igual de interesante y todo un cambio con el anterior. Se trata de una novela negra de corte clásico ambientada en Vigo, protagonizada por un policía al más puro estilo europeo, Leo Caldas, que piensa, reflexiona y duda, y su ayudante, Rafa Estévez, un aragonés tozudo y algo exaltado. Lo que podría haber sido una novela clónica se convierte gracias al buen hacer de Domingo Villar en un gran monumento a los libros de misterio del viejo continente, entendiendo como pocos autores los distintos precedentes -de Plinio a Petra Delicado- y logrando que su trama fluida y sus bien definidos personajes la conviertan en el mejor libro de este género que se ha dado en España en los últimos años.

"Soy un gato" (Natsume Soseki, Impedimenta) es una recuperación. Publicado hace años por Trotta como "Yo, el gato" estamos ante una de las grandes obras de la literatura japonesa, quizá el mejor libro de un autor como Soseki al que no le faltan títulos que opten al título como la certera "Botchan" o la romántica "Kokoro". En "Soy un gato" es el felino innominado quien lleva el peso de la historia, suyas son las reflexiones sobre al naturaleza humana y el orden social, opiniones ácidas, originales o tiernas, siempre con un punto de ironía pero también llenas de cariño hacia esa familia que se empeña en cuidarle. Desde la literatura -ejemplificada por el trabajo como profesor del cabeza de familia, Kushami y más aún por las invenciones de Meitei- a las ciencias, las artes o las relaciones sociales, nada escapa a la mirada penetrante de este gato.

Son tres recomendaciones con las que es difícil fallar, pero recordad que hay más libros y que siempre podéis contar con los libreros para asistiros en la búsqueda de la novela (o el libro de cuentos, o el ensayo, o...) ideal para la persona a la que decidáis alegrar el día regalándole un libro.

Éste es mi librero: se llama Jónatan Rubio y le podéis encontrar en la librería El Tranvía, en el cc Moda Shopping de Madrid.

jueves, 8 de abril de 2010

Lo que nos llegó del frío (*)


En esto de los libros siempre ha habido modas. Unas veces nos toca novela histórica, otras historias semibiográficas y, últimamente, género negro nórdico. Lo bueno de todos estos movimientos inesperados es que permiten dar a conocer a autores que sin el título que causó la moda quizá hubieran pasado desapercibidos. Ése es el gran triunfo de Stieg Larsson.

Tenemos ejemplos de sobra de autores nórdicos, pero como parece que este blog va de tres en tres (al menos de momento) hablemos hoy de tres autores de un mismo país: Noruega.

Quizá el más representativo de todos los autores noruegos lo sea por pura representatividad. Anne Holt lo es por sus ventas y por su relevancia social, no todo el mundo puede poner en su solapa que ha sido ministra de justicia. Sin embargo no hay ninguna aburrida recursividad burocrática ni ninguna maquiavélica trama política, las historias de Holt son muy humanas, mezcla de los métodos y asesinos americanos con el estudio de unos personajes rotos que siempre gustaron a los europeos. Lo son en "Castigo" (Ediciones B), su gran novela, la primera en la que descubiremos a una investigadora que preferiría ser cualquier otra cosa y a un policía que debe sobreponerse a su pasado. La excelente maquinaria interna nos tiene siempre por delante de los policías y, pese a eso, intrigados. Lejos de posteriores juegos metaficcionales como en "Crepúsculo en Oslo" (Roca) o de historias algo más sencillas como las que tienen por protagonista a Hanne Wilhelmsen, este primer libro del comisario Yngvar Stubo y la no-profiler Inger Johanne Vik será el primero de unas colaboraciones realmente fructíferas.

K. O. Dahl también está logrando frutos: de entrada, la moda nórdica le ha permitido recuperar su nombre completo, Kjell Olla, tras años publicándole con un nombre más inglés. En cuanto entrabas en la lectura y conocías a Gunnarstranda y Frølich dejabas de tener dudas sobre la localización de los crímenes y sobre la calidad de la narración. Traídos primero por Planeta en "La Muerte en una Noche de Verano", una negra historia sobre una joven asesinada el día después de asistir a una fiesta en el centro de desintoxicación en el que había estado internada, la trama sin concesiones pero con resplandeciente humor negro que permite sobrellevar la dureza de la trama, hizo que muchos buscáramos sus siguientes libros, "Un muerto en el escaparate" que es casi una saga familiar y su más reciente título, ya con el nombre recobrado: "Un paso en falso". Una pequeña curiosidad, se trata de los títulos segundo, tercero y quinto de la serie. Esperemos que Planeta pueda traernos todos.

Para el final el más adictivo de todos, el que parece haber realizado un sortilegio para que sus páginas nos atrapen, Jo Nesbo. Leer "Petirrojo" (RBA) es un placer, la trama de género negro está construida como un mecanismo de relojería y el estudio psicológico de los personajes sirve para centrarnos,a cercarnos, para que empaticemos con esos personajes y nos importe casi más sus vidas que la muerte que vertebra el texto. Conseguir ambas metas a la vez es digno de nuestra rendida admiración más que de aplauso -que también- y por ello no pudimos esperar a atacar "Némesis" (RBA) en cuanto la publicaron. Con toda la calidad ya demostrada tuvimos más ejemplos de la brillantez de Harry Hole, de su forma trepidante de atender al investigación, y si es cierto que no llega a las alturas de "Petirrojo" se debe, simplemente, a que pocas novelas negras se le pueden comparar.

*Éste es uno de los muchos, muchos posts que no podrían existir sin mi librero de cabecera, mitad crítico mitad psicólogo, que me descubre tesoros como éstos. Gracias mil.